"Todos iguales, todos diferentes"

Tema: “Todos iguales, todos diferentes”

Nombre: Utopía de una sociedad desigual.

La sociedad es un conjunto de seres humanos que conviven y se relacionan unos con otros. Para una correcta convivencia entre todos sería necesario que se exaltaran diversos valores, tales como respeto, tolerancia, libertad de expresión, comprensión, comunicación cordial, entre otros muchos. Dichos valores se pueden considerar como básicos hoy en día y la enseñanza de éstos debe hacerse desde la más temprana infancia partiendo desde el ámbito familiar y apoyándose en la educación que se recibe en el sistema educativo. En éste último se impartiría una educación que formará la personalidad de cada individuo, adaptándose a la personalidad de cada sujeto y fomentando las capacidades y conocimientos para acercarlos a la realidad actual, promoviendo la solidaridad y evitando la discriminación, todo ello para lograr un único objetivo y fundamental como es la unión social con igualdad de oportunidades para todos y cada uno de los individuos que la formamos.

Partiendo desde la más tierna infancia sería fundamental empezar a tomar conciencia de lo importante que es convivir en sociedad y formar parte de ella, utilizando el diálogo como herramienta imprescindible para ello y teniendo en cuenta que todos han de ser respetados y escuchados con igualdad, independientemente de la raza, cultura, religión o sexo que cada uno posea.
Todos tenemos derechos y poseemos unas obligaciones que nos impulsan a crear este tipo de sociedad, actualmente utópica; pero para preservar un futuro en el que todos puedan ser reconocidos como ciudadanos y disfrutar de las libertades a las que podemos acceder hoy día, tenemos la obligación de erigirlo para todos los que tienen derecho de poder disfrutarlo. Esta utopía con la que muchos sueñan, se ha de construir independientemente de las características raciales, físicas o psíquicas que puedan tener, puesto que sería un futuro para todos por igual y que se disfrutaría de forma común, ya que aunque todos somos diferentes, en el fondo, somos iguales.